¿Alguna vez te pasó que te pusiste un conjunto hermoso y sentiste que no conectaba con vos? Que no te representaba, que no iba con tu día ni con cómo te sentías. Es que muchas veces pensamos que la lencería ideal para tu cuerpo tiene que ver solo con el talle o el corte, pero hay algo más: cómo te hace sentir.

Ya hablamos de qué modelo resalta más tus curvas, pero hoy te proponemos cambiar la mirada. ¿Qué pasa si elegís lencería según cómo querés sentirte?

En Araqui creemos que un buen conjunto también puede cambiar tu día. Te contiene, te da confianza, te relaja, te pone en mood. Y no hay una sola forma de sentirse bien: por eso armamos esta guía para que puedas elegir lencería según tu ánimo, no solo tu cuerpo.

Cuando querés contención y foco

¿Tenés un día cargado, mil cosas por hacer, o simplemente necesitás estructura? Los corpiños armados con aro son tu mejor aliado. Modelos como APRIL o LUCIA te dan esa firmeza que acompaña. Sujetan, levantan, marcan. Te hacen sentir que tenés el control, aunque todo a tu alrededor esté un poco caótico. 

Es el clásico que no falla para cuando necesitás foco, soporte literal y emocional, y un plus de confianza.

Cuando querés sentirte liviana y suave

Hay días en los que solo querés aflojar. Trabajás desde casa, bajás un cambio o tu cuerpo te pide pausa. Para esos momentos, lo mejor son los corpiños soft de algodón, sin aro ni relleno, que te abrazan sin invadir.

Ideal para home office, para un finde tranquilo o para esos días en los que necesitás volver a vos, porque estar cómoda también es una forma de poder. El algodón respira con vos y te recuerda que no hace falta sufrir para verse (y sentirse) bien. El favorito para esos días:  MARTINA

Cuando querés jugar y seducir

¿Salís? ¿Tenés una cita? ¿O simplemente querés verte al espejo y decirte “wow”?
La lencería con encaje, transparencias o detalles sensuales es perfecta para activar ese lado tuyo que quiere destacar.

Conjuntos de encaje, transparencias y detalles como los VALENTINA o ISABELLA te invitan a conectar con tu parte más sensual. No es solo para que te vean sexy: es para que vos te sientas así, porque está buenísimo vestirse para una misma y conectar con el deseo.

Elegir también es escucharte

Porque la lencería también dice algo de vos. No todo tiene que ser funcional. La lencería puede ser un mimo, una forma de expresarte, o simplemente una elección que te hace sentir bien. Algunos días tu cuerpo pide contención, otros pide libertad, otros brillo. Y tener opciones para cada uno de esos momentos hace que te sientas más vos.

No importa si estás sola, acompañada, trabajando o descansando: elegir qué ponerte abajo también es parte de quererte.

En Araqui, queremos que cada conjunto sea una posibilidad. Una forma de decir “acá estoy”, desde lo más íntimo.